Desempolvando… Buffalo

Australia y su capital, Sidney, son bien conocidas en el mundo del rock por ser el lugar de nacimiento de AC/DC. Sin embargo, casi cinco años antes de que los hermanos Young decidieran dar forma a su legendaria banda, David Tice y Peter Wells, que más tarde fundaría Rose Tattoo, ponían en marcha un proyecto llamado Buffalo, una de las formaciones más interesantes que podemos encontrar a comienzos de los setenta (y ya llevamos tres en esta sección junto con Captain Beyond y Flower Travellin…™ Band).

En la segunda mitad de los 60, Tice y Wells habían estado en varias bandas locales de Brisbane, pero no es hasta 1968 cuando montan lo que sería el origen de Buffalo, una banda llamada Head con el guitarrista Neil Jensen y el batería Steve Jones. Un par de años más tarde deciden probar en suerte en la capital, donde ya empiezan los cambios de formación que serían habituales en los próximos años, y Jensen y Jones son sustituidos por dos nuevos componentes. Según cuentan, aunque la historia no pasa de mera anécdota sin comprobar, el nombre fue elegido por la banda buscando al azar sobre el mapa de Australia. Eso sí, sólo algún nombre que empezara por …œb… ya que, según su manager, todas las bandas cuyos nombres empezaban por esta letra eran de éxito (Black Sabbath, Beatles, Blue Cheer, etc.). Sea cierta o no esta historia, al poco la banda firmaba un contrato con Vértigo, donde se encontraban gente como Uriah Heep y Black Sabbath, siendo además el primer grupo que fichaban el sello discográfico fuera de las fronteras inglesas.

Su primer trabajo, «Dead Forever», fue lanzado en 1971. Este es un álbum lleno de riffs densos, una pesada atmósfera y ciertos toques blues y al rock de los cincuenta que tiene enormes composiciones, como «Pay My Dues», «Bean Stew» o «Leader». Por las mismas fechas aparecieron también un par de singles que hoy en día siguen siendo bastante complicados de encontrar: el primero con «Sunshine Suzie» y una versión de «No Particular Place To Go», y el segundo con los temas «Just A Rock’N’Roll Little» y «Rock Barberhop». La tibia repercusión que este trabajo obtuvo provocó que la formación entrara en unos meses de parón, con algunos miembros que mantenían los ensayos mientras otros formaban otras bandas.

Sin embargo, todo cambia a comienzos de 1973. En aquel momento Black Sabbath está de gira por el país y el sello prácticamente impone a Buffalo como acompañantes de los de Birmingham, seguramente a la búsqueda de un grupo que ya tuviera cierto número de aficionados en el país y que además se movía en terrenos musicales muy parecidos. La reacción, ahora sí, fue muy buena hacia aquellos compatriotas a los que muchos vieron incluso superiores a los ingleses. Tanto, que más tarde fueron elegidos de nuevo para telonear a bandas como Status Quo o Slade.

Decía David Tice en una entrevista publicada en «RAM» magazine en el número 6, de mayo de 1975: …œyou gotta play loud…. Y eso hicieron con su siguiente trabajo, editado en 1973, con un título más que adecuado: «Volcanic Rock». Probablemente este el disco más completo de los australianos: potentes bases rítmicas, un Tice enorme en la voz y una buena cantidad de riffs compactos y espesos con una pequeña dosis de la psicodelia propia de aquellos años. Y desde luego no podemos dejar de destacar aquella portada, que muchos tildaron de obscena y que inició una polémica que continuaría en mayor grado con su siguiente álbum. «Only Want You For Your Body», editado en 1974, llegó incluso a venderse en bolsas de plástico para ocultar la imagen y en algunas ciudades se valoró seriamente prohibir su venta. En lo musical, la banda se decanta por sonidos más directos y dejan algo de lado sus orígenes más psicodélicos, lo que da lugar a un disco mucho más inmediato con temas como «What…™s Going On», «I…™m Coming On» o «United Nations».

Hasta aquí la época dorada de los australianos, aunque seguirían activos en años sucesivos, pero sus álbumes no estuvieron a la altura de los tres primeros. «Mother…™s Choice», de 1976, buscaba descaradamente una mayor repercusión a nivel internacional, ya que Buffalo aún no había gozado de reconocimiento fuera de sus fronteras. La portada de aquel álbum ya dejaba claras las líneas por las que querían moverse, eludiendo cualquier posibilidad de polémica y aportando un tono amable y luminoso. «Average Rock…™n Roller» puso el punto y final a casi diez años de trayectoria de casi diez años y después de una gira como teloneros de Rainbow.