SUN – Brutal Pop 2 (2023)

Una bonita casualidad internáutica nos llevó a conocer a SUN y su «brutal pop», una etiqueta que le sienta como un guante.

Esta es la historia de un amor a primera vista. Justo fue la semana pasada cuando nos topamos con un vídeo en directo del nuevo proyecto de Karoline Rose desde una pequeña sala londinense y al momento nos quedamos prendados de su manera de combinar canciones con gancho, cortas y melódicas con arrebatos de metal extremo.

Investigando hemos descubierto que la francoalemana (nacida en Karlsruhe pero criada en Francia) ha resultado ser toda una mujer del renacimiento. No solo canta, compone e interpreta los temas de SUN, también diseña sus propios vestidos y realiza sus vídeos. Ha participado en películas como «Tom Medina» (Tony Gatlif, 2021) que llegó al Festival de Cannes, estuvo a punto de representar a Alemania en Eurovisión en 2014 y fue finalista de la edición francesa de La Voz en 2013. Seguramente fue en esa época cuando se dio cuenta que la filosofía DIY era la que mejor le convenía para sacar adelante su carrera sin concesiones de ningún tipo.

Su amor a partes iguales por ABBA y Gojira es visible en este segundo EP, un trabajo que habla de relaciones personales y que le dedica a su fallecida prima Karine. Un disco donde combina las bases de la música alternativa de los 90 con los riffs más aplastantes, con una voz limpia que puede recordar a Anneke van Giersbergen o PJ Harvey y que rasga al estilo de de Jinjer o Arch Enemy.

Los amantes del metal la recibiremos con los brazos abiertos, aunque no lo tengo tan claro con los fans del pop. Lo que es seguro es que a Karoline Rose todavía le queda camino para rato.