Sons – Hallo (2025)

La verdad es que estamos un poco dolidos a este lado de los Pirineos, porque en estos tres años que han pasado tras la edición de «Sweet Boy», el cuarteto no nos ha visitado ni una sola vez. Y no somos pocos los que seguimos con mucha atención todos los movimientos de estos belgas.

A ver si tenemos más suerte con su tercer trabajo «Hallo», un disco menos intenso que sus predecesores pero más centrado en el mensaje y la melodía. Buena parte de este cambio de perspectiva la tiene el productor británico David McCracken, que viajó hasta Melsele (pegado a Amberes) para ayudar con la composición y acabó de grabarlo en Londres junto a la banda. McCracken, conocido por su trabajo con bandas como Depeche Mode o Placebo, ayudó a redefinir la identidad sonora del grupo, empujándolos hacia un sonido menos saturado. Les sacó de su zona de confort y les introdujo una premisa: «¿Qué es lo que queréis decir en este disco?».

El resultado ha sido un disco fresco y luminoso, alejado del post punk más ruidoso y con la banda experimentando con nuevas texturas. Once temas en 35 minutos que se inspiran en la vida cotidiana de una manera sincera y optimista. No seré yo el que les critique por intentar llegar a la gente de otras maneras, mientras mantengan la energía que hemos visto en su reciente concierto en el Ancienne Belgique.